OLVIDA TUS MIEDOS Y ENFRÉNTATE A LA VIDA

Los seres humanos estamos llenos de una serie de sentimientos  que no nos permiten avanzar, que nos estancan, uno de ellos y el peor de todos es el miedo. Debido  a este en muchas ocasiones nos creemos incapaces de emprender algún desafío, por lo que nos hemos convertido en seres conformistas y mediocres que le temen a los retos y esperamos que las cosas sean sencillas.

Pero resulta que la vida es un reto, un desafío, una aventura que debemos vivir día a día con todas sus dificultades. A la vida llegan  momentos duros en los que creemos que no podemos más, pero es de estos momentos   de los que aprendemos, son estos los que nos enseñan cómo vivir, como crecer, como madurar.

Si vamos por la vida siendo facilitas y mediocres perderemos la oportunidad de vivir plenamente, de saber de qué somos capaces de hace. Así que debemos dejar nuestros pensamientos mediocres ya que en la dificultad se aprende, se crece y a través de estas es que se vive plenamente.

ENFRENTARNOS A LOS DILEMAS.

la vida es un constante camino de decisiones, estas decisiones pueden ser tomadas o realizarse por impulsos, impulsos que son provocados por las emociones. Enfrentarnos a un dilema es encontrarse entre la espada y la pared, si te mueves recibirás una estocada, de lo contrario permanecerás de por vida en un solo lugar, donde la ansiedad te dominara, y vivirás con el lamento y el dolor de mejor haber elegido una estocada. 

Nuestras emociones se pueden convertir en nuestro monstruo interno cuando quieren algo y no pueden tenerlo, se pueden convertir en el dolor mas grande que puede opacar el resto de tus emociones apoderándose completamente de tu ser.

Todos saben que cuando nos encontramos en un dilema no sabes que hacer, es como quitarle a un imán su metal, un dile es quitarle a nuestros sentimiento lo que que quieren pero no pueden tener. Me referido siempre a nuestros sentimientos porque ellos son los que nos mueven, nos motivan, nos desmotivan, NOS HACEN SENTIR.

Los dilemas son tan complicados que muchas personas optan por quedarse entre la espada y pared aunque saben que en ese mismo lugar están con vida pero no vivos, mientras que otras profieren una estocada y revivir.

los dilemas se pueden sentir como el cierre de un ciclo y la puerta para otro.