“SOCIEDAD
MACHISTA.”
Las
mujeres desde tiempo atrás han vivido en una sociedad machista, donde se
considera que las mujeres son para tener hijos y atender la casa, por el simple
hecho de pensar que ellas no tienen capacidades para trabajar o las destrezas que
poseen y no se toma la verdadera importancia que tienen.
Se
considera que el hombre es la voz y la mujer obedece, esto se genera desde la
crianza o desde la educación en casa, el niño y la niña toma ejemplo de lo que
ve, si un niño ve que su padre manda por completo sobre su esposa este lo imita
y la niña observa que su madre se deja mandar o manipular, ella se acostumbra a
esto creciendo con inseguridades y debilidades. Pero si sus mayores le enseñan
lo fuerte que es ella, que es un ser individual que puede alcanzar todo lo que
se proponga, esta niña será una mujer fuerte, con decisiones y seguridad.
Si
empezamos a cambiar en nuestra sociedad podemos acabar con este “MACHISMO ASESINO”.
¿LUCHA O TENDENCIA?
A través de la historia se ha visto
como las mujeres somos catalogadas como débiles, poca cosa que debemos estar
sujetas a la voluntad del hombre. Debido a esto muchas mujeres valientes han
luchado por hacer notar y valer nuestros derechos, gracias a esto hoy en día
hay un gran avance en la integración de la mujer en la sociedad como algo más
que un ama de casa o una compañía para el hombre.
También es cierto que la generación
de esta época no tiene una idea clara de lo que significa esta lucha por hacer
que nos notemos en la sociedad por el contrario la hemos convertido en una
propaganda, una tendencia, ya que nos hacemos llamar así mismas feministas
cuando no tenemos el mas mínimo conocimiento de lo que esto significa y hemos
creado un concepto errado al creer que nuestra lucha es simplemente una guerra
contra el hombre. Pero somos más que un grupo patético de mujeres que le intentan demostrar al hombre que son
mejores que ellos.
En pleno siglo XXl aún existen mujeres que existen bajo opresión
y discriminación en muchas ocasiones esto es debido a que somos nosotras mismas
las que nos consideramos débiles porque no tenemos el valor para
defender nuestra posición en la sociedad.